lunes, 14 de noviembre de 2016

Brillar en la oscuridad

Hoy tenemos una de esas lunas que llaman "super lunas" y que se ven cada no sé qué panzá de años... Desde mi balcón se aprecia perfectamente como si fuera un foco iluminando la negritud de la noche, brillando en la oscuridad (algo que todos deseamos alguna vez).
Tras mi última experiencia en Madrid me quedé desencantada con esto del "artisteo". Tanta gente detrás de lo mismo, buscando una oportunidad (SU oportunidad), presentándose diariamente a castings y soportando negativas, rechazos, palabras hirientes y la desmotivación que todo ello acarrea. Yo me hice un viaje de ida y vuelta en el mismo día para eso... para encontrarme con una prueba de cámara tonta, a la que se presentaron muchísimas chicas con el mismo perfil que yo y esperando que entre todas ellas, la directora del casting se fijase precisamente en mí. Es como comprar lotería y creer que te va a tocar porque te lo mereces, porque te hace mucha falta o porque llevas mucho tiempo comprando; es una cuestión de azar. Todos quieren (y necesitan) que les toque la lotería. Allí mismo, mientras esperaba a que dijeran mi nombre, conocí a una chica que se había pegado también un viaje de autobús solo para eso (en su caso desde Alicante) y se volvía en cuanto acabara la prueba, igual que yo. Que te vuelvan a llamar tampoco es garantía de nada, al menos en este caso.
Me presenté porque el trabajo (en caso de conseguirlo) está muy bien pagado y necesito dinero, pero el dinero huye de mí... he tenido una segunda oportunidad de ganar pelas con un bolo de los Happy Fish, muy bien pagado también, y he tenido que rechazarlo porque mis compañeros no podían hacerlo ese día. Rodeada como estoy de gente que no piensa como yo, ni tiene las mismas necesidades, ni las mismas aspiraciones, ni nada de nada, pues qué quiero... Con Jalea no vamos mejor (siempre económicamente hablando): esto de ir de legales es un asco, Hacienda se queda con mi dinero, y entre retenciones varias, tantos por ciento a repartir, etc... acabas ganando un mojón.
Así que entre esto de querer destacar y darte cuenta que eres un grano de arena en el desierto, y trabajar para ganar dinero y no ganar una mierda estoy en plena crisis existencial, replanteándome mi vida o, mejor dicho, la forma de tomármela. Mañana tengo otro casting, éste en Granada. Así que sigo comprando lotería, pero ya no espero que me toque, ni espero que reduzcan el 21% de IVA cultural y dejen de robarme, ni espero ganar dinero con la música, ni espero brillar como la super luna. Pero no estoy triste. En realidad tengo más ganas que nunca de trabajar y de aprender. La falta de dinero es un problema pero también me hace apreciar más lo que hago, tomármelo en serio pero sin que eso me afecte negativamente, y me anima a seguir intentándolo. Igual es hora de ponerme en el lugar que me corresponde y empezar a construir una buena escalera en lugar de dar saltos.